En la presentación del informe El Futuro es Energía en el Congreso de los Diputados, María Caso, cofundadora de Demos Lab, destacó la importancia de que la juventud mantenga un papel protagonista en el debate sobre el futuro energético de España. El informe, que recoge las opiniones de más de 8.000 jóvenes, expone la necesidad urgente de acelerar la transición hacia energías renovables y de asegurar que las nuevas generaciones sean escuchadas en las decisiones políticas que afectan al futuro del país.
La juventud ha demostrado su compromiso en la lucha contra el cambio climático, demandando un cambio en el modelo energético actual. Durante el acto, se puso de manifiesto que las preocupaciones de los jóvenes no solo se centran en la crisis climática, sino también en la necesidad de políticas más ambiciosas que impulsen una transición energética justa y sostenible.
Las demandas juveniles en el centro de la agenda política
El informe presentado en el Congreso resalta que el 89% de los jóvenes considera urgente la transición energética como una de las claves para frenar el cambio climático. Entre las principales propuestas se encuentran el fomento de las energías renovables, la modernización de las infraestructuras para el autoconsumo y la implementación de la fiscalidad verde para penalizar a las empresas más contaminantes.
Las organizaciones promotoras Demos Lab, Talento para el Futuro y Democracia Digital, a través de El Futuro es Energía, han facilitado que estas propuestas lleguen a las instituciones, con el objetivo de que los responsables políticos tomen acciones concretas para responder a las demandas de las nuevas generaciones.
La participación juvenil en este tipo de debates es vista como esencial para asegurar que las políticas energéticas sean inclusivas y representen los intereses de quienes serán más afectados por la crisis climática en el futuro.
El compromiso de Demos Lab con la participación ciudadana
El evento en el Congreso de los Diputados reforzó la importancia de iniciativas como El Futuro es Energía, que promueven la participación activa de la ciudadanía en la toma de decisiones políticas. El Futuro es Ahora ha sido un actor clave en trasladar las preocupaciones de los jóvenes al debate político, asegurando que la transición energética sea un proceso inclusivo y participativo.
El compromiso de la organización con la participación ciudadana sigue siendo una de las principales fuerzas para impulsar cambios reales en las políticas públicas, especialmente en el ámbito energético, donde la juventud juega un papel crucial en la definición del futuro.