El pasado verano se cometieron dos robos con fuerza en un establecimiento hostelero de la localidad de Los Arcos, en días sucesivos, cometidos por distintos autores. Tras ser denunciados los hechos en la Oficina de Atención al Ciudadano de la Guardia Civil de Los Arcos se dio comienzo a la denominada “Operación Sernebro”, llevada a cabo por el Equipo de Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Navarra.
En el primer robo fueron sustraídas numerosas cajetillas de tabaco de la máquina y dinero en efectivo, por valor de más de 2000 euros. Además de los daños causados a la máquina de tabaco, valorados en más de 3000 euros. Gracias a la colaboración policial, fue posible localizar a los dos presuntos autores, dos varones de 36 y 46 años vecinos de Bilbao, que la Policía Municipal de Bilbao identificó cuando portaban multitud de paquetes de tabaco, herramientas y dinero en efectivo. La trazabilidad de las cajetillas de tabaco, certificada por la Sección de Fiscal y de Fronteras de la Guardia Civil de Beriáin, fue clave para relacionar a los dos autores con el robo cometido en Los Arcos.
Al día siguiente del primer robo, se recibió llamada en el Teléfono de Atención al Ciudadano 062 de un ciudadano alertando de haber observado cómo tres individuos abandonaban el mismo establecimiento en un vehículo a gran velocidad al que habrían accedido fracturando el cristal. La Central Operativa de Servicios (C.O.S), movilizó a la patrulla más cercana, que con la descripción del vehículo aportada por el testigo consiguió localizarlo circulando por la A-12 dirección Pamplona.
Los agentes de Seguridad Ciudadana iniciaron el seguimiento del vehículo, que circulaba a gran velocidad, para interceptarlo e identificar a los ocupantes. Al tratar de darle el alto, el conductor hizo caso omiso y continuó la huida realizando maniobras temerarias, circulando incluso con las luces apagadas y tratando de sacar de la vía al vehículo policial en varias ocasiones. Los agentes lograron realizar varias fotografías de los ocupantes para poder identificarlos, ante la imposibilidad de darle el alto. Finalmente, localizaron esa misma noche el turismo en la localidad de Echarri-Aranaz donde había sido abandonado. El propietario del vehículo, que había sido reconocido por los agentes como el conductor durante la huida, denunció horas después la sustracción del mismo, tratando de desvincularse de los hechos cometidos esa noche.
La Operación culminó a principios de este año con la localización de estas tres personas, dos varones y una mujer de 33, 39 y 44 años en la localidad de Miranda de Ebro (Burgos), donde dos de ellos fueron detenidos y el tercero investigado, como presuntos autores de un delito de robo con fuerza, pertenencia a grupo criminal, contra la seguridad vial, resistencia y desobediencia grave a agentes de la autoridad, y un delito leve de estafa, siendo puestos a disposición de la autoridad judicial competente.