La previsión es que este fenómeno ocurra el miércoles, jueves y viernes.
Esto, unido a la baja presión atmosférica y a la fuerza y dirección del viento previstos, podría suponer un riesgo de desbordamientos puntuales cuando coincidan con las pleamares más elevadas, entre las cinco y media y las seis y media de la tarde.
El Ayuntamiento de Bilbao permanecerá alerta y ha previsto un contingente por si fuera necesario.