La plaza Félix Azpilicueta de Fuenmayor se convierte nuevamente en una sala de exposiciones al aire libre para acoger las mejoras imágenes del XV concurso de fotografía ‘Naturaleza de La Rioja’, que organiza la Consejería de Sostenibilidad, Transición Ecológica y Portavocía del Gobierno de La Rioja. La muestra estará en la localidad desde el 21 de noviembre hasta el próximo 12 de diciembre.
Una singular selección de 29 fotografías de gran formato que recogen la riqueza, la singularidad y la belleza de la flora y fauna riojana y entre las que se encuentran las seis imágenes ganadoras del certamen de esa edición.
Esta muestra itinerante que recorre de junio a febrero diez localidades riojanas es el colofón al concurso fotográfico «Naturaleza de La Rioja», que en esta edición reunió a 179 fotógrafos de toda España y también de otros países que presentaron un total de 770 imágenes.
Los municipios de Santo Domingo de la Calzada, Ezcaray, Haro, Nájera, Cervera del Río Alhama, Arnedo, Calahorra y Logroño ya han tenido ocasión de poder disfrutar en sus calles y plazas de esta muestra itinerante que, tras su paso por Fuenmayor, completará el recorrido de esta edición el próximo mes de febrero en Alfaro.
Disfrutar de la naturaleza y plasmar su belleza
El Concurso Fotográfico Naturaleza de La Rioja nació con el doble objetivo de animar a los aficionados a la fotografía a salir al campo para plasmar la belleza de la naturaleza de la región y, al mismo tiempo, que la actividad sirviera como elemento concienciador y sensibilizador sobre la importancia de conservar nuestro entorno natural.
En estos años, el creciente prestigio del certamen y la cuantía de los premios (6.600 euros en total) lo han convertido en una cita habitual para fotógrafos de todo el país, incluso de fuera de nuestras fronteras. A lo largo de sus 15 ediciones se han presentado al certamen más de 15.000 fotografías. Este año han presentado sus trabajos cinco fotógrafos residentes en Argentina, Bangladesh, Colombia, Alemania y Perú.
Obras premiadas
Entre todas ellas, el jurado concedió el primer premio, dotado con 2.500 euros, a la fotografía ‘Entre centellas’, de Pepe Badía Marrero, de Terrasa, Barcelona, la espectacular imagen de una avispa excavadora donde se conjugan de forma magistral el color, el instante decisivo y la precisión técnica dando como resultado un excelente ejercicio de equilibrio y belleza para el espectador.
El segundo premio tiene como protagonista a un murciélago ‘Cazando al vuelo’, en una imagen nocturna de gran dificultad técnica por la ausencia de luz y la velocidad de desplazamiento de la especie, con el plus añadido de mostrar la imagen reflejada en el agua lo que proporciona la visión del anverso y reverso del mamífero en una sola instantánea. El autor de esta imagen es el salmantino Roberto García Sáenz, que recibió un premio de 1.500 euros. El tercer puesto se lo llevó la fotografía “El emperador”, una impactante imagen de un haya, una de las especies emblemáticas de los bosques de la sierra riojana, sobre la que Pablo Pérez Herrero aportó su particular perspectiva y punto de vista.
El certamen entregó otros cuatro premios. Un premio para la fotografía más creativa, dotado de 500 euros, para la obra ‘Irisaciones de la araña tigre’, de Eduardo Blanco Mendizábal, por la visión tan personal que el autor tuvo al fotografiar un motivo común de una manera diferente, permitiendo al espectador ver algo que solo con la adecuada técnica utilizada es posible ver y que resulta inspirador por la belleza del resultado. El premio para la fotografía con mayor valor natural, también dotado con 500, lo ganó Alfonso Roldán Losada, que captó con maestría ‘El vuelo de la perdicera’, especie que se encuentra catalogada en peligro de extinción en nuestra comunidad autónoma.
El certamen, que busca fomentar entre los jóvenes la afición por esta especialidad fotográfica que les ayuda a conocer y respetar nuestro entorno natural, incluye un premio dotado con 300 euros para el participante menor de 18 años. En esta edición, Dafne Gómez Velasco, de Navarrete, con tan solo 10 años fue la merecedora de este premio con su foto ‘Sonrisa’, una simpática fotografía de una libélula, uno de los insectos preferidos de la pequeña autora y en la que el animal “parecía sonreírle”.
También se concedió un premio de 300 euros para la mejor imagen de fotógrafos residentes en La Rioja. En este edición, el premio ha sido para Eduardo Ruiz Baltanás, que supo captar con su objetivo la belleza que dejó una “Ventisca en el San Lorenzo”, uno de los enclaves más espectaculares de la naturaleza riojana.